La terapia de la psicología humanista es conocida como "terapia centrada en el cliente" y es un modelo de terapia no directiva. Rogers desarrolló este método de manera muy amplia y lo practico a lo largo de su trayectoria profesional.
Fue el primero que utilizó la palabra cliente, para referirse a los pacientes, creía que de este modo, el trato entre la persona que necesita ayuda y el terapeuta resultaban más igualitario y no se establecía la relación de poder y autoridad que suele darse entre el médico y el paciente.
La clave de la terapia tiene dos tipos de preguntas:
- ¿Cómo puedo tratar, curar o cambiar a una persona?
- ¿Cómo puedo crear una relación que esta persona pueda utilizar para su propio desarrollo?
El modelo de terapia humanista pretende crear una relación, un ambiente, en que el cliente pueda explicar libremente sus sentimientos.
Rogers creía que las personas tienen capacidad y posibilidades de aumentar su autoconocimiento y resolver sus conflictos si los pueden expresar en voz alta y tienen a alguien que los escuche y vaya reforzando sus descubrimientos, esto implica que el terapeuta debe escuchar activamente al cliente.
LA TERAPIA DE LA GESTALT
Esta terapia comparte con el humanismo el concepto de que el terapeuta sólo acompaña al cliente, le muestra caminos y posibilidades de mejora y que el cliente podrá sanarse por sí solo.
Se basa en las siguientes reglas:
- El principio del aquí y el ahora, consiste en que el cliente sea consiente de sus experiencias en el momento de la terapia y no mire el pasado o en el futuro.
- El principio del yo y el tú, se trata de una comunicación directa entre terapeuta y cliente, siendo responsables ambos de lo que dicen y hacen.
- El principio del continuo de la conciencia, hace hincapié en el "cómo" y no en el "porqué".
- Convertir preguntas en afirmaciones, las personas se hacen preguntas para no afrontar sus decisiones o no ser responsables de sus conductas.
La terapia gestáltica puede practicarse de forma individual o en grupo.
